Se ha preguntado ud porqué Martin Lutero clavó
sus 95 tesis en la puerta del castillo
de Wittenberg el 31 de Octubre de 1517?
Muchos no saben las razones detrás de tal decisión la
cual llevó a Lutero a cambiar el trayecto de la iglesia Cristiana en la edad
media aunque él no tenía ni idea de las consecuencias de sus actos.
CONTEXTO HISTORICO
Empecemos situando el contexto religioso en donde
Lutero vivió. Martin Lutero (1483-1546) nació en Turingia (Saxonia) en lo que
ahora es el país de Alemania. Su padre era un exitoso propietario de una
fundición y un operador de minas, por lo que tenía suficiente dinero para
enviar a su hijo a estudiar leyes en la ciudad de Erfurt. En cambio, Lutero se
unió a la orden religiosa de los ermitaños agustinos y estudió teología.
Estudió con Johann von Staupitz, y finalmente lo reemplazó como profesor de
estudios bíblicos en la Universidad de Wittenburg. Lutero permaneció allí la
mayor parte del resto de su vida.
Cuando tenía poco más de treinta años, Lutero comenzó
a tener dudas sobre la base teológica de muchas de las prácticas cotidianas de
la Iglesia católica. En otras palabras, se preguntó si todas las cosas hechas
por los líderes católicos podrían estar justificadas.
El 31 de marzo de 1515, el Papa León X emitió una bula
(decreto público) de indulgencia plenaria para eliminar las penas o castigos
temporales de los pecados que se aferraban a las almas de los vivos y los
muertos. El Papa comisionó la venta y Tetzel fue reclutado para predicarlo.
Nombrado subcomisionado de indulgencias en Meissen en
1516, Tetzel procedería a los territorios de Albrecht en Magdeburgo y
Halberstadt ese año. La comisión le prohibió predicar indulgencias en Sajonia,
que pertenecía al rival de Albrecht y al benefactor de Lutero, Federico el
Sabio. Lo más cercano que vendría Tetzel era a San Pedro en Jüterbog, donde
muchos viajaron desde Wittenberg para comprarlos. También trajeron historias de
Tetzel y su famosa rima: "Cuando suena la moneda en el cofre / el alma del
purgatorio salta de allí".
¿Qué es una indulgencia? Martin Brecht lo expresa
amablemente: "Una indulgencia o amabilidad, como se puede traducir la
palabra latina, significaba la conmutación o reducción de los actos penitenciales
y el castigo temporal por el pecado por parte de la iglesia ..." [i] La
indulgencia de Leo X fue "plenaria" que significaba que esta
"bondad" podría aplicarse a todos los pecados. "Uno podría
obtener una dispensa por casi todos los delitos, incluido el adulterio y la
adquisición de bienes ilegales". [ii]
Para organizar su pensamiento, Lutero compuso una
lista de declaraciones y preguntas que se conocieron como las "95
Tesis" cuestionando muchas prácticas y doctrinas católicas romanas.
En
noviembre de 1517, con el “milagro” de la imprenta, alguien los imprimió y
distribuyó sin su permiso, causando revuelo en los niveles más altos de la
Iglesia Católica. El Papa lo condenó en 1520 (bula papal Exsurge Domine)
expulsándole oficialmente de la iglesia católica Romana, pero todo lo que hizo
fue hacer a Lutero más radical. En el mismo año, Lutero escribió su obra La
libertad de un cristiano, La servidumbre pagana de la Iglesia y Un
llamamiento a la clase gobernante de la nación alemana. Ambos libros explicaron
la teoría de la salvación de Lutero (soteriología), su teoría de la iglesia
(eclesiología) y su teoría del papel del estado en la reforma de la iglesia.
Aunque sus escritos convirtieron a Lutero en el líder filosófico de la Reforma
Protestante, también aumentaron la presión sobre él para que se retractara. El
Sacro Emperador Romano lo encontró culpable de herejía en un juicio religioso
en la ciudad de Worms (1521), pero cuando Lutero se negó a retroceder, también
se convirtió en el líder moral de la Reforma.
Por un precio que tenían que pagar el católico promedio,
su ansiedad sobre cuánto tiempo su alma, o las almas de sus padres fallecidos,
languidecerían en el purgatorio podría ser anulada por una suma de dinero con
el fin de ayudar a completar la construcción de la basílica de San Pedro en
Roma, la cual era la verdadera razón de las indulgencias, la colección de
dinero del vulgo ignorante para la construcción de la basílica y no la “salvación”
de las almas en el purgatorio.
Eso es evidente en la proclamación de la venta de
indulgencias, lo podemos ver en el sermón de John Tetzel, el monje que vendió
indulgencias en Alemania e inspiró la protesta de Martin Luther en sus 95 tesis
en 1517:
¿No escuchas las voces de tus padres muertos y
otros familiares que gritan: "Ten piedad de nosotros, porque sufrimos un
gran castigo y dolor. De esto, podrías liberarnos con unas pocas limosnas ...
Te hemos creado, te alimentaste, te cuidé y te dejamos nuestros bienes
temporales. ¿Por qué nos tratas tan cruelmente y nos dejas sufrir en las
llamas, cuando solo se necesita un poco para salvarnos?
[Fuente: Die Reformation en Augenzeugen Berichten, editado por Helmar Junghaus
(Dusseldorf: Karl Rauch Verlag, 1967), 44.]
Se decía que "Tan pronto como suena la moneda en
el cofre, el alma del purgatorio salta afuera de allí". [iii] Tan
importante fue el esfuerzo por recaudar fondos que el orden regular de predicar
el evangelio se dejó de lado para que las indulgencias pudieran ser predicado.
[iv] Esto causó en muchos y en Lutero un rechazo tremendo y directo a tal
práctica deshonesta.
Evidentemente, el mensaje de Tetzel de que con dinero podrían
sacar a sus familiares muertos del purgatorio tuvo éxito en el vulgo ignorante
de ese tiempo. Los residentes de Wittenberg corrieron a Tetzel para poder
comprar, lo que ellos creían, “el camino al cielo para ellos y sus familias.”
Estas fueron las mismas almas que confesaron sus pecados a Lutero cuando este
era sacerdote y que regularmente lo habían escuchado predicar las Escrituras.
Aunque Lutero aún no había comprendido completamente
la doctrina de justificación de las Escrituras en ese entonces, que definía la
predicación de la Reforma, sabía lo suficiente que sus oyentes habían
abandonado la tristeza que es según Dios por el pecado y el deseo genuino de
enmendar la vida de uno por una falsa esperanza de las indulgencias que prometía
algo que el dinero no podría comprar. Esta situación le llevó a escribió al
Arzobispo de Mainz advirtiéndole del peligro y al mismo tiempo hizo públicas
sus preocupaciones publicando las famosas “95” Tesis.
¿Hasta dónde se extendieron estos abusos de la indulgencias
del Papa? Años más tarde, Lutero escribió al clero reunido en la Dieta de
Augsburgo en 1530 que el tráfico de indulgencias, con la aprobación de obispos
y papas, equivalía a una negación de la gracia de Dios en la sangre de Cristo y
el tormento de las conciencias cristianas. Los predicadores de indulgencia no
se concentraron en decir que el Papa solo está absolviendo las penas
temporales, sino la culpa en general.
¿El resultado? No hay lugar para la
predicación de Cristo, su sangre, su justicia y su fe. Enumeró quince abusos
específicos, de los cuales vamos a ver algunos aquí.
"1. Vendieron la indulgencia como la gracia
divina que perdona el pecado. De ese modo, la sangre y la muerte de Cristo
fueron negadas y blasfemadas junto con el Espíritu Santo y el evangelio.
2. Ellos vendieron falsamente almas fuera del
purgatorio a través de las indulgencias, para gran vergüenza de la Divina
Majestad, pero trajo mucho dinero para ellos.
3. Pusieron al papa en el cielo como un dios que podía
ordenar a los ángeles que llevaran al cielo las almas de los peregrinos que
murieron en su viaje a Roma.
4. El evangelio, que es, después de todo, la única
indulgencia verdadera, tuvo que guardar silencio en las iglesias en deferencia
a la indulgencia.
8. En la indulgencia vendieron buenas obras a toda la
cristiandad y la absolución, también, como algo especial, que, sin embargo, el
evangelio da gratuitamente al mundo entero para siempre. Así, las conciencias
fueron desviadas del evangelio y de Cristo a las obras de los hombres. ”[V]
En 1537, cuando Lutero volvió a mirar la controversia
mientras escribía los Artículos de Smalcald, identificó la errónea doctrina del
arrepentimiento como la que estaba detrás de todo el desastre. En el proceso de
luchar después de tener el correcto tipo de tristeza, enumerar todos los
pecados y hacer las obras de penitencia, "no había fe ni Cristo".
[Vi] Lejos de calmar las almas ansiosas, las indulgencias proliferaron bajo el
disfraz de un "Año jubilar" por el dinero hecho para Roma. Como
Lutero escribe, "la gente vino corriendo" con la esperanza de
ser liberados de compensar sus pecados, pero encontraron miseria espiritual y
desesperanza.
“Incluso esto no ayudó en absoluto. Porque aunque
el Papa le enseñó a la gente a depender y confiar en tales indulgencias, él
mismo hizo que el proceso fuera incierto cuando afirmó en sus decretos: ``
Quien quiera participar del año de indulgencia o jubileo debe ser contrito,
confesarse y dar dinero. . '... Del mismo modo, nadie sabía qué alma estaba en
el purgatorio y, de los que supuestamente estaban allí, nadie sabía qué habían sido realmente contritos y confesados. Por lo tanto, el papa tomó el dinero,
consoló a la gente con su autoridad e indulgencia, y sin embargo los dirigió
una vez más a sus trabajos inciertos ". [Vii].
Lutero señaló: ¿Cuál es el punto si las
personas ya se están vinculando al sistema de arrepentimiento? No se puede
encontrar ninguna certeza real, excepto en las obras de los hombres al final
del día. Coincidentemente, esta misma crítica se aplica a la doctrina romana
moderna de las indulgencias que requiere que el penitente ya esté "en
un estado de gracia", "tenga la disposición interior de un
desprendimiento completo del pecado, incluso del pecado venial",
"haya confesado sacramentalmente sus pecados", Etc. [viii]
¿Qué más confianza se le puede dar a una persona que ya es tan pura?
Las indulgencias, en los días de Lutero y en las
nuestras, no tienen sentido cuando nos unimos al verdadero arrepentimiento y fe enseñado por el Espíritu Santo en las Escrituras. Tanto para el hombre que está
tratando de pagar sus pecados como para el hombre que piensa que no necesita
hacer nada, Juan el Bautista "viene y destruye a ambos lados con un solo
trueno, diciendo:" ¡Arrepiéntanse! "" [Ix] Nadie es justo (Sal.
143: 2; Rom. 3:10). Todos somos pecadores llevando la debilidad de nuestra
carne hasta el día de la muerte. Ninguna cantidad de satisfacciones puede ser
aprovechada ante el trono de Dios sino lo que ganamos por la fe de Jesús. Como
escribe Lutero,
“Todos los que confiesan que todo es puro pecado con
ellos y abrazan todos los pecados, no permiten excepciones, y no se olvidan de uno
solo. Por lo tanto, la satisfacción nunca puede ser incierta tampoco. Porque no
consiste en nuestras obras inciertas y pecaminosas, sino en el sufrimiento y la
sangre del inocente "Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo"
[Juan 1:29] ". [X]
¿No hay consecuencias temporales y terrenales por el
pecado? Por supuesto. Pero a este respecto, nuestro ejemplo debería ser el
ladrón en la cruz (Lucas 23: 39-43). Sabía que sufría justamente por sus
crímenes al ser crucificado. Es cierto que lo hizo. Pero en la hora de la
muerte, no tenía nada que ofrecerle a Dios sino fe, solo pura confianza en
Cristo. "Jesús, acuérdate de mí cuando vengas a tu reino". Jesús
no le dijo nada de satisfacciones o de purificar su alma en el purgatorio. Él
dijo: "En verdad, te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso".
Vemos entonces que la razón que llevó a Lutero a escribir y publicar las 95 tesis en contra de las prácticas de la iglesia católica romana fue las ventas ineficaces y fraudulentas de las indulgencias.
Las buenas obras siguen a la fe. Pero ante Dios, tu justicia
y salvación dependen de Cristo y su sacrificio en la cruz como propiciación y expiación
por nuestros pecados. El dinero y las satisfacciones no significan nada ante la justicia de Dios. La
doctrina católica romana de las indulgencias, son y siempre han sido un
doctrina humana, falsa, que es incapaz de salvar a los vivos y a los muertos.
Caesar Arealo
[i] Martin
Brecht, Martin Luther: His Road to Reformation 1483-1521 (Minneapolis:
Fortress Press, 1981), 176. Para
obtener más información sobre los orígenes históricos y los abusos de las
indulgencias, lea Harold Grimm, The Reformation Era 1500-1650, 2nd Edition
(Nueva York: Macmillan, 1973), 38-41. También, Lewis Spitz, The
Renaissance and Reformation Movements, Edición revisada, vol. II (St. Louis:
Concordia Publishing House, 1971), 335-337.
[ii] Brecht,
180
[iii] ¿Cómo sonaron estos sermones?
Martin Brecht identifica cuatro gracias que los predicadores enfatizaron en sus
sermones. "Eran, primero, la remisión completa de todos los pecados ... La
segunda gracia principal consistía en la posibilidad de obtener una carta
confesional que daba derecho dos veces a recibir la absolución de todos los pecados,
incluso aquellos reservados al Papa, en un momento propio. discreción y en la
hora de la muerte. La tercera gracia principal, que también podría obtenerse
comprando una carta confesional, prometió a quien la obtuvo y a sus familiares
fallecidos la participación en todos los bienes de la iglesia, es decir, sus
oraciones, ayunos, limosnas y otras obras piadosas. Al igual que la gracia
anterior, esto también podría obtenerse sin confesión; Incluso en un estado de
pecado, uno también podría participar en las bendiciones de la comunión de la
iglesia. No sin razón se ensalzó especialmente la cuarta gracia. Consistió en
la remisión del castigo de los pecados por las almas del purgatorio por medio
de la intercesión del papa cuando uno pagaba por estas almas ". Ibíd.,
180-182
[iv] En
el mismo lugar
[v] LW
34:16-17
[vi] SA,
III, 3, 20 (Kolb-Wengert, 315)
[vii] SA,
III, 3, 27 (Kolb-Wengert, 316)
[viii]
http://www.vatican.va/roman_curia/tribunals/apost_penit/documents/rc_trib_appen_pro_20000129_indulgence_en.html
[ix] SA,
III, 3, 30 (Kolb-Wengert, 317) Matt. 3:2
[x] SA,
III, 3, 37-38 (Kolb-Wengert, 318)
[xi] SA,
III, 13, 2-3 (Kolb-Wengert, 325)
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