LA CONFESION DE BASILEA Y EL MAGISTRADO CIVIL

La confesión de Basilea es una de las muchas confesiones de fe producida por la Reforma. Fue publicada en 1534 y debe de distinguirse de la primera y segunda Confesion Helvetica. Su autor es Myconio, quien se fundamento sobre una confesión de Eocolampadios, su predecesor en Basilea. Concluye con una afirmación de que someten su confesión al juicio de las Escrituras Divinas, y se mantienen ellos mismos siempre agradecidos de obedecer a Dios y Su Palabra si necesitamos ser corregidos por las Sagradas Escrituras.

En este sección, publico acerca del magistrado civil, el cual reconoce que es el “siervo” de Dios, para proteger al bueno y castigar al malo. Y que una de sus funciones es hacer que el nombre de Jesucristo sea santificado en el pueblo y la extensión de su reino.

LA PRIMERA CONFESION DE BASILEA (1534)

"Dios ha dado la responsabilidad a los gobiernos, Sus siervos, con la espada y con el poder externo más grande para la protección del bueno y la venganza  y castigo sobre los malhechores. Por esta razón, cada gobierno Cristiano con el cual deseamos ser contados, debería hacer todo lo que está en su poder para ver el Nombre de Dios santificado entre sus súbditos, que vea el reino de Dios extendido, y su Voluntad sea observada por la asidua extirpación de crímenes."

Por Caesar Arevalo